Cabo solitario donde los haya, recóndito, a merced de los temporales de tramontana. Está situado en el norte de Menorca, y limita con el Parque Natural de s'Albufera des Grau, la zona húmeda más importante de la isla. El cabo de Favàritx es una punta rocosa de pizarra negra, habitada por pequeñas plantas, algunas de ellas endemismos, que forma bahías a sus dos lados.

La costa es un paisaje de acantilados de poca altura, de pizarra negra y gris, uno de los terrenos geológicos más antiguos de las Baleares. Entre las pizarras todavía se pueden hallar fósiles de los primeros seres que vivieron en este lugar hace miles de años, como crustáceos y otros animalillos marinos.

El faro sufre el azote de los vientos, y las olas a menudo inundan una explanada, más allá de la playa de guijarros, que al secarse forma una superficie blanquecina, conocida como "la salina". Se dice que las noches de luna llena, caminar por estos charcos procura energía y fertilidad, dones por excelencia de la luna y el mar.

Es el faro más moderno de Menorca, inaugurado el 24 de septiembre de 1922, y está situado a 47 metros sobre el nivel del mar. Sus destellos pueden verse a 26 millas de distancia. En 1997 fue el escenario de la película El faro, del director Miguel Balaguer.