El legado arqueológico de Mallorca

Mallorca es un tesoro arqueológico que ofrece una inmersión en las culturas que han habitado la isla desde tiempos prehistóricos. Una de las más completas es la ruta arqueológica Sencelles-Costitx, un itinerario que te lleva a visitar yacimientos como la Cova del Bisbe, una cueva funeraria del 1000-1500 a.n.e o el Talayot de Son Fred, una monumental construcción talayótica del 950 a.C. Otras paradas importantes incluyen el santuario de Son Corró y el poblado den Turassot.

Más allá de esta ruta, la isla alberga tesoros como Ses Païsses en Artà, uno de los yacimientos talayóticos mejor conservados, y las ruinas romanas de Pollentia en Alcúdia.

También destaca el poblado de Capocorb Vell, en Llucmajor, con más de 600 m² de estructuras talayóticas, y Son Fornés en Montuiri, el poblado talayótico mejor documentado de Mallorca.

Cada uno de estos sitios refleja una etapa única de la rica historia de Mallorca, desde los primeros pobladores hasta el dominio romano y más allá. ¡Haz tu propia ruta y explora el enorme legado arqueológico de la isla!