Terramoll es una bodega familiar que empezó su actividad en el año 2000. Nuestro objetivo es obtener unos vinos de la máxima calidad que reflejen el carácter de Formentera. Para ello hemos apostado por variedades autóctonas y otras foráneas, pero que se adaptan a las exigentes condiciones climáticas que nos rodean.
Situada en el hermoso paraje de La Mola, en la parte maá alta de Formentera donde encontramos una relación muy especial entre suelo y clima, una auténtica comarca dentro de la isla con características diferenciadas del resto. El Faro de la Mola preside el majestuoso acantilado, en invierno, es un espectáculo de emociones intensas de soledad y belleza. En este entorno privilegiado, las bodegas Terramoll apostaron fuerte por la elaboración de vinos de calidad en la isla de Formentera allá por el año 2000, decisión arriesgada que les ha reportado enormes éxitos.
La finca posee una superficie de 40 hectáreas a 200 metrossobre el nivel del mar, de las cuales 14 son utilizadas para el cultivo de las variedades Malvasía, Moscatel, Moll y Garnatcha blanca, Macabeo y Viognier, mientras que en variedades tintas han elegido Cabernet- Sauvignon, Merlot y Monastrell. La Monastrell la adquieren también a algunos agricultores de la isla, y en un futuro se pretende aumentar esa producción a 25 hectáreas.
La bodega ha culminado con éxito un proyecto de elaboración de vino blanco con la variedad Viognier recientemente autorizada por la Conselleria de Agricultura. Este nuevo vino promete ser otro éxito del equipo técnico de Terramoll que han sabido unir con maestría el potencial aromático de la variedad francesa con la mediterránea Malvasia.
En definitiva,Terramoll se perfila como un proyecto muy serio que abandera los nuevos tiempos de la viticultura isleña, creatividad y tradición que van a dar mucho que hablar.
