Se sitúa al noroeste de la isla, entre la punta de La Gavina y la punta de Sa Pedrera, con una extensión de 146 hc. Al final del siglo XVIII fue propiedad del convento de Jesuitas de Ibiza y después pasó al Seminario, hasta que fue desamortizada (1855). 

En 1874 compró las tierras el empresario y político Antoni Marroig, para convertirlas en una explotación para la exportación de vino a Francia, donde la producción había caído a causa de la plaga de la filoxera. Con la decadencia de la familia Marroig, la casa se convirtió en el Hotel IFA en 1933. La lucha de la sociedad civil para evitar su urbanización culminó con su adquisición por el Govern de les Illes Balears en 1998. Actualmente Can Marroig aloja el Centro de Interpretación del Parque Natural de Ses Salines y dependencias del Institut Balear de la Naturalesa (IBANAT).

La finca alberga restos de la actividad agrícola reciente (molinos-bomba y una noria, acequias, etc.) y diversos yacimientos arqueológicos de importancia aún sin excavar, así como interesantes canteras de piedra arenisca de explotación antigua. Existen unas rutas de excursión a pie que permiten hacer un recorrido circular de 2,6 Km.